sábado, 10 de enero de 2015




Dice Agustín Rossi en la entrevista:
"Cuando vos participás de una primaria, una vez que aceptás la totalidad de los candidatos que están tenés que aceptar las reglas del juego. Si no, no participes".


Tal cual. Visto el tema desde el hoy, todo se encamina a aceptar que ganó Scioli, teniendo a mano un argumento de legitimación: lo eligió la gente, por lo tanto, hay que aceptarlo.

Los cruces polémicos recientes son, al menos por ahora, pirotecnia que sobró de las fiestas.

Están yendo a una interna que de antemano, saben que van a perder a manos del candidato de la involución tranquila.

Y esto pasa porque en tres gobiernos no se hizo nada serio para evitarlo, construyendo organización político-militante que de manera colectiva pudiera profundizar el impulso de los fundadores.

A la sumo la expectativa es negociar después con Scioli un lugar: saqué tantos votos en la interna ¿Que hay para mi espacio? Aún cuando los candidatos en si, no pretendan nada para ellos porque son gente honorable.

Varios de los precandidatos ya dijeron: lo importante es que gane el FpV. Traducido: a cualquier precio.

Así las PASO, en lugar de un instrumento de democratización real de la política, se convierten en herramienta de legitimación de la decadencia. Una puesta en escena maquillada, de la capitulación.

Para no pocos, lo verdaderamente importante es no quedar en la estación, cuando parta la última formación hacia Octubre 2015. A nadie seduce la intemperie. Y afuera es noche y llueve tanto... Están demasiado plácidamente adaptados y abundantemente pagados, unos cuantos compañeros...

Cuidado, porque el escenario real existente, es este. Todo lo demás, es ruido, para tapar argumentos y evitar responder a preguntas incómodas.

Y en este camino, si no están todos, si la mayoría. Entre ellos, los que podríamos considerar mejores.

C.V.

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